Levanté la cabeza súbitamente y sufrí entonces uno de mis ocasionales mareos perdiendo el contacto de mis cuatro extremidades y otros apéndices de mi cuerpo con la roca (como sería barbilla y poca cosa más, claro). Así que estiré al máximo mi envergadura hasta empotrarme al diedro y conseguí anclarme a la pared haciendo verdaderas proezas del mismísimo Spiderman y sin apenas caer unos cm. El compañero de cordada ni se enteró ni me pilló.
He recurrido a la wiki a ver si me aclaraba algo, pero visto lo visto os dejo con el marrón...
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